¿Solo soy un pecador, salvo por gracia? ¿En serio?
Yo crecí con ese coro del evangelio (de James M. Gray, presidente del Instituto Bíblico Moody) y creo que entiendo su propósito. Pero analicemos cuidadosamente su contenido:
“Solo soy un pecador, salvo por gracia”
Nada he obtenido sino lo que recibí,
Gracia lo ha concedido, desde que creí.
Jactándome excluido, orgullo humillado;
Solo soy un pecador, salvo por gracia.
Sufre un pecador, cuyo corazón desborda,
Amar a su Salvador, para decirle lo que sabe;
Una vez más para contarlo, ¿me abrazaría?
Solo soy un pecador, salvo por gracia.
Y su exégesis: Solo [no más que] soy [tiempo presente] un pecador, salvo por gracia.
Sugiero que le estamos haciendo un grave perjuicio a Dios al limitar su obra al perdón de los pecadores y llevarlos al cielo cuando mueren. Ni siquiera las palabras de Jesús en Juan 8 – “Ni yo te condeno: vete, y no peques más” – describen el evangelio completo. Más bien, el Redentor vino a crear un pueblo santo, para que gobierne con Él en un nuevo reino, borrando para siempre el fracaso del Edén. Vino a transformar a su nuevo pueblo completamente.
Lea Romanos 8: no se puede hojear y luego resaltar las bendiciones posteriores a la conversión e imaginar que un cristiano es nada más que un pecador perdonado. [1]
Pasé solo 10 minutos hojeando las páginas de las Escrituras y encontré una gran cantidad de bendiciones que tenemos AHORA y que ciertamente NO pudimos tener antes de Cristo. Cada una de ellas cambia las reglas del juego, porque cambia a las personas. Y cada una de ellas es un milagro divino. Y ninguna de las cuales una persona puede conseguir simplemente por tener sus pecados perdonados.
Después de enumerar 50, ¡decidí cortarlo!
1. Unión con Cristo
2. Nuestra persona interior transformada al igual que nuestras emociones, voluntad, procesos cognitivos, motivaciones.
3. El Espíritu nos ilumina cuando estudiamos la Biblia
4. Ahora podemos elegir la justicia; ¡seguro que no podíamos antes del nuevo nacimiento!
5. Nacidos de nuevo: no es solo una experiencia de perdón; “nacer” implica “vivir una nueva vida”
6. Matrimonios que siguen el modelo de Cristo
7. Adoptados por Dios
8. Co-herederos con Cristo
9. El perdón diario de los pecados
10. Conocemos la voluntad de Dios
11. Herencia eterna
12. Sellados por el Espíritu
13. Sabiduría Divina
14. Conocimiento de Dios
15. Vivos con Jesús
16. Muertos al pecado
17. Conocemos el amor de Dios
18. Somos capacitados para amarlo
19. Poder divino
20. Sentarse juntos en los lugares celestiales en Jesús
21. Conoce el buen plan de Dios
22. Nuestras obras preparadas de antemano por Dios
23. Unión con otros creyentes
24. Ciudadanos del cielo
25. Miembros de la casa de Dios
26. Pleno acceso a Dios a través de Jesús
27. Dones espirituales
28. Bautizados por el Espíritu en un solo Cuerpo
29. Nuevos hermanos y hermanas en una familia más real que la de carne y hueso
30. Plenitud del Espíritu
31. Dios nos presta su propia armadura
32. Podemos tener la victoria en la batalla espiritual
33. Predestinados para la gloria
34. Santificados por la gracia divina, no por el esfuerzo humano
35. La guia de Dios
36. Nunca dejados ni abandonados
37. Habilidad para no pecar
38. Paz con Dios
39. Todo lo podemos en Cristo
40. Tenemos un pacto establecido por Dios, el Nuevo Pacto
41. Bendiciones aun en las pruebas
42. Dios escucha nuestras oraciones
43. Bendiciones financieras
44. Resurrección futura
45. Riquezas de la gracia de Dios
46. Bendita esperanza de la venida de Cristo
47. Paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento
48. Capacidad de resistir al diablo que huirá de nosotros
49. El Espíritu Santo ora por nosotros
50. Dios obra en nosotros el querer y el actuar para cumplir su buen propósito.
Charles Spurgeon tenía un profundo aprecio por el perdón de la gracia de Dios, e incluso él dijo: “La gracia que no cambia mi vida no salvará mi alma”.
“Solo soy un pecador, salvo por gracia” es un eslogan atrayente, pegadizo, pero difícilmente el mensaje que recibimos del Nuevo Testamento. Un mejor coro podría ir así: “Yo ERA solamente un pecador, luego FUI salvo, puramente por gracia, y hombre, ¡partiendo desde ahi, la cosa comienza a cuajar”.
NOTAS:
[1] He argumentado que la interpretación de que Romanos 7 es una descripción de la vida cristiana normal es, desde el contexto, errónea. Vea mi artículo completo AQUÍ. También recomiendo encarecidamente el libro del erudito reformado John Murray, Redemption: accomplished and applied o su artículo más corto sobre “Santificación definitiva y progresiva”.
Gary Shogren, PhD en la exégesis del Nuevo Testamento, Profesor del Nuevo Testamento, ESEPA, San José, Costa Rica. Traducción por Märv Medardo.
Excelente Dr Gary, yo estoy viviendo en este momento el 41- Bendecida en medio de la prueba!!! Que el Señor lo bendiga
Eludis Madera
27/10/2022 at 2:30 pm