Hechos NVI y el bautismo del etíope
Así escucho en YouTube: La NVI no puede ser una versión confiable, ¡así que quita Hechos 8:37 de la Palabra!
Examinamos los datos.
En la Nuevo Versión Internacional se ve este texto:
36 Mientras iban por el camino, llegaron a un lugar donde había agua, y dijo el eunuco:
—Mire usted, aquí hay agua. ¿Qué impide que yo sea bautizado?
38 Entonces mandó parar la carroza, y ambos bajaron al agua, y Felipe lo bautizó.
En Reina Valera Revisada, tenemos otro versículo agregado:
36Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco:
Aquí hay agua; ¿qué impide que yo sea bautizado? 37Felipe dijo: Si crees de todo corazón, bien puedes.
Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios.
38Y mandó parar el carro; y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó.
Ahora, algunos dicen que, ¡aja! La Nueva Versión Internacional es parte de un complot. Quita la doctrina de salvación por la fe en Cristo; borra la necesidad de bautismo; ¡niega la verdad de que, Jesucristo es el Hijo de Dios!! Y desde allí, esta versión es satánica o católica o de la Nueva Era.
Si lo aceptamos, hipotéticamente, entonces tendremos preguntarnos, por qué estos conspiradores aparentemente no tenían ningún problema con, por ejemplo, Hechos 8:12 NVI, “Pero cuando creyeron a Felipe, que les anunciaba las buenas nuevas del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, tanto hombres como mujeres se bautizaron.” U olvidaron que Pablo iba a decir en Romanos 10:9 NVI, “si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo.” Entonces, ¡sería un complot llevado a cabo por incompetentes!
Y recordemos que, los traductores de la NVI o la Nueva Traducción Viviente no quitaron este versículo a discreción, o porque no lo quieren, sino porque, la evidencia antigua sugiere fuertemente que, Lucas no escribió el v. 37. Si Lucas no lo escribió, el Espíritu Santo no lo inspiró, no es la Palabra de Dios para el Pueblo de Dios.
En este cuatrimestre, enseño el curso Canon y Texto Bíblico – Nuevo Testameno. Una tarea fue el estudio de Hechos 8:37 para concluir si Lucas lo escribió o si un copista lo agregó, siglos después. Doy la bienvenida a William Granados, quien compartirá su tarea; su nota no dependió de su conclusión, a propósito, sino de que él siguió los pasos correctos en la ciencia de la crítica textual. ¡Bendiciones lectores y William! Gary
William Granados García
Análisis de Hechos 8:37
NA28: 36 ὡς δὲ ἐπορεύοντο κατὰ τὴν ὁδόν, ἦλθον ἐπί τι ὕδωρ, καί φησιν ὁ εὐνοῦχος· ἰδοὺ ὕδωρ, τί κωλύει με βαπτισθῆναι; 38καὶ ἐκέλευσεν στῆναι τὸ ἅρμα καὶ κατέβησαν ἀμφότεροι εἰς τὸ ὕδωρ, ὅ τε Φίλιππος καὶ ὁ εὐνοῦχος, καὶ ἐβάπτισεν αὐτόν.
RV60: 36 Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco: Aquí hay agua; ¿qué impide que yo sea bautizado? 37 Felipe dijo: Si crees de todo corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios. 38 Y mandó parar el carro; y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó.
NVI: 36 Mientras iban por el camino, llegaron a un lugar donde había agua, y dijo el eunuco: —Mire usted, aquí hay agua. ¿Qué impide que yo sea bautizado? 38 Entonces mandó parar la carroza, y ambos bajaron al agua, y Felipe lo bautizó.
Hechos 8:37 es un versículo controversial a la luz de la crítica bíblica. Muchas personas se alarman porque consideran un sacrilegio el hecho de que las versiones modernas de la Biblia omitan un versículo tan importante que hace una confesión de fe en Jesucristo y de esta manera violen la Sagrada Escritura. Pero vayamos al contexto del asunto para entender el malentendido.
Ante la pregunta del Etíope a Felipe sobre cuál es el impedimento para ser bautizado si allí hay agua, Felipe responde (según las versiones tradicionales de la Biblia como RV60, por ejemplo): “Si crees de todo corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios”. Este es el versículo 37. Luego de esto Felipe manda a detener el carro y ambos descienden al agua para que el eunuco sea bautizado.
Ahora bien, cuando vemos la NVI, BLPH, NTV, TLA, e incluso la RVA, observamos que se omite todo este versículo. Es decir, se omite la frase “Si crees de todo corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios” (ειπεν δε ο φιλιππος ει πιστευεις εξ ολης της καρδιας εξεστιν αποκριθεις δε ειπεν πιστευω τον υιον του θεου ειναι τον ιησουν χριστον). Para muchos acá está en juego un aspecto importantísimo de la fe cristiana: Creer en el corazón que Jesucristo es el Hijo de Dios. Algunos suponen que si en estas versiones se omite esto es porque intentan ocultarnos algo y tienen intenciones de no reconocer a Jesús como el Hijo de Dios. No hay nada más alejado de la verdad que este tipo de afirmaciones sin fundamento teórico.
A continuación, intentaré realizar un breve análisis para dilucidar el problema acá presente y así comprender cuál es el sentido y propósito de la crítica bíblica, tomando como ejemplo este versículo, para poder entender su contribución a la fe de la iglesia.
Evidencia externa
Para comenzar es necesario comprender que cuando decimos “evidencia externa” hacemos referencia a los manuscritos existentes que brindan apoyo a una u otra lectura de un determinado texto. Entre las principales consideraciones para tomar una decisión sobre un pasaje son: la antigüedad de los manuscritos, la diversidad de las familias textuales que posean el texto, también usualmente la lectura más difícil de explicar sea la aceptada por el hecho de que lo más probable es que un escriba intente clarificar un pasaje antes que dificultarlo, etc.
En este caso, el versículo 37 no aparece en la mayoría de los manuscritos antiguos de mayor importancia sino en manuscritos un poco más tardíos y con diversas variaciones. Este versículo falta en los principales manuscritos griegos, y lo excluyen casi todas las ediciones críticas modernas. Metzger señala que este versículo “es una adición occidental que no se encuentra en 𝔓45 א A B C 33 81 614 vg sirp, h copsa, bo et, aunque sí en E y en múltiples mss minúsculos, itgig, h vgmss sirh con* copG67 arm, con bastantes variaciones de menor importancia” (p. 314).
A todo esto añade que no hay una razón que explique la omisión de este versículo por parte de los escribas. La explicación más plausible es que se agregara como una nota al margen representando una fórmula de confesión como requerimiento sine qua non el bautismo sería aplicado. Así, “aunque el manuscrito neotestamentario que contiene estas palabras data del siglo VI (ms E), la tradición de la confesión de fe en Cristo por parte del etíope ya circulaba en las últimas décadas del siglo II” (Metzger, p. 314).
Esto precisamente es también lo que señalan diversos comentaristas al respecto de esta variante: Guy Williamson, por ejemplo, señala: “Posiblemente comenzó como una nota marginal, inspirada en la ordenanza del bautismo, y pasó después al texto durante su transmisión” (p. 107).
La hipótesis que sostiene el reconocido comentarista bíblico Kistemaker es similar: “Quizás en la iglesia primitiva se consideró necesario que el etíope primero profesara su fe antes de ser bautizado. Los escribas, entonces, agregaron el comentario de Felipe y la confesión del eunuco al margen del manuscrito de Hechos. Las palabras dichas por el eunuco pudieron haber sido usadas como una fórmula bautismal hacia el final del siglo II; las palabras eran conocidas en aquellos días, lo que es evidente en los escritos de Ireneo, el padre de la iglesia, quien cita parte de esta fórmula. El versículo 37 fue agregado al texto griego vía manuscritos medievales posteriores; y de allí fue traducido a nuestra propia lengua” (2007, p. 342).
Entonces, si la evidencia externa sugiere que el texto de 8:37 no fue escrito originalmente por Lucas, ¿cómo es que ha llegado hasta nosotros este versículo? Como se ha señalado, algunos manuscritos minúsculos incluían este texto desde bien temprano, a pesar de que su contraparte los supera. El erudito F. F. Bruce señala que el asunto es que “aunque esta adición no se encuentra en el Texto Bizantino, Erasmo la incorporó en sus ediciones impresas; creía que había sido omitida por descuido de los copistas” (p. 177).
A esto podemos añadir las palabras de Metzger quien señala que “aunque esta frase no aparece en el manuscrito medieval en el que Erasmo se basó (ms 2) si aparece en el margen de otro manuscrito (ms 4) de donde Erasmo la toma y la incluye en su edición por considerarla un descuido de los escribas” (p. 314).
Por consiguiente, la traducción que posteriormente se realiza al español tomando como base el texto griego de Erasmo incluye este versículo. Sin embargo, en vistas de la enorme evidencia que hoy poseemos en contra, la mayoría de las versiones modernas de la biblia han decidido omitir este versículo y agregar una nota o corchetes para hacernos entender que este versículo no fue originalmente escrito por Lucas.
Evidencia interna
Si a la luz de la evidencia externa se comprende que el pasaje es un añadido, ahora es necesario analizar la evidencia interna para concluir si este pasaje está en concordancia con respecto al contenido del texto bíblico, y en este caso específicamente si está relacionado con el contenido de Hechos y con el estilo de su autor (Lucas).
Si analizamos el contexto del pasaje podemos dilucidar una curiosa interrupción en la narración. La maravilla de dicha narración es que se puede sobreentender que el Eunuco ha creído en Cristo y por consiguiente Felipe procede a bautizarlo. Así el texto entre la pregunta del impedimento para ser bautizado (v. 36, que parece ser una pregunta retórica) y la detención del carro para proceder al bautismo (v. 38) tiene una conexión más evidente. Sin embargo, como señala Bruce, quizás a algún escriba esto no le parecía suficiente ya que Felipe debía haber buscado la genuinidad de la fe del eunuco, pero “sin duda, Felipe estaba bien seguro, pero hay mentes incapaces de contentarse con dejar que tales cosas se sobreentiendan” (p. 181).
Por otra parte, para algunos comentaristas como Metzger y Kistemaker la expresión τον ιησουν χριστον no es característica de Lucas. Si se observa, por ejemplo, un pasaje similar en cuanto una formulación teológica en un evento de diálogo narrativo, vemos que la expresión es un tanto diferente. En Hechos 16:16-41 se narra la historia del encarcelamiento de Pablo y Silas. Allí, después de un acto milagroso en el que tienen la posibilidad de escaparse de prisión, el carcelero está a punto de suicidarse. Pablo clamó para hacerle notar que ellos aún estaban en la cárcel y no se habían escapado. El carcelero se asusta y se postra temblando ante Pablo y Silas y les implora sobre qué debe hacer para ser salvo. La respuesta de ellos es la siguiente: “Cree en el Señor Jesús, y serás salvo, tú y tu casa” (v.31; πίστευσον ἐπὶ τὸν κύριον Ἰησοῦν καὶ σωθήσῃ σὺ καὶ ὁ οἶκός σου,).
Nuevamente la crítica señala que ciertos manuscritos agregan a τὸν κύριον Ἰησοῦν la palabra Χριστον. Sin embargo se prefiere, a la luz de la evidencia, la expresión τὸν κύριον Ἰησοῦν. Este es sólo un ejemplo para mostrar lo expresado por Metzger y Kistemaker al respecto del estilo lucano que prefiere hablar del Señor Jesús y no típicamente del Señor Jesucristo (así también Esteban en 7:59). Por tanto, la evidencia interna tampoco sustenta con mucha fuerza la existencia original del v. 37 como sí lo hace la afirmación de que es una adición posterior al texto escrito por Lucas.
Conclusiones
Se ha observado que la evidencia externa apunta a que el versículo 37 es una adición posterior que realizó algún escriba, quizás por fines litúrgicos, para complementar el texto de Lucas. Esta adición pudo realizarse al margen del texto pero posteriormente fue añadida al texto en sí. Tenemos el texto en la RV60 de esta forma debido a la decisión errónea que tomó Erasmo al elaborar su edición del Nuevo Testamento Griego (sin embargo, hay que reconocer que Erasmo no tenía el aparato crítico que poseemos actualmente, con lo cual no era una decisión fácil y considero que para su momento fue la mejor decisión).
La evidencia interna también manifiesta que el versículo 37 no se sustenta con fuerza ya que no encaja muy bien en la narración del texto que desarrolla Lucas. La pregunta del eunuco en v. 36 parece ser más bien retórica antes que informativa. Además, como señalan los expertos, este versículo no refleja el estilo de Lucas cuando se refiere a Jesús, ya que casi siempre usa las expresiones Jesús, Señor Jesús, Señor, o Jesús de Nazaret; mientras que Señor Jesucristo prácticamente no aparece (solamente en 2:38 Pedro usa nombre de Jesucristo). Por lo demás, la evidencia interna también apunta a que este versículo es un añadido posterior y no el texto original de Lucas.
Como se puede comprender, la omisión de este versículo en las versiones modernas de la Biblia no tiene ningún aspecto conspirativo, más bien pretenden establecer el texto original tal como lo escribieron los autores bíblicos inspirados por Dios, en este caso Lucas. Así que en lugar de hablar de omisión de un versículo en las versiones modernas de la Biblia, deberíamos estar hablando de la adición de un versículo en las versiones un poco menos modernas de las Escrituras. Asimismo, la confesión de fe en Jesucristo no se ve afectada en ningún sentido al reconocer la omisión de este versículo en alguna versión moderna de la Biblia ya que como se pudo observar en Hechos 16:31 en cualquier edición crítica del Nuevo Testamento se afirma la doctrina cristiana según la cual para ser salvo solamente hay que creer en el Señor Jesús.
Referencias bibliográficas
Bruce, F. F. (2007). Hechos de los Apóstoles: Introducción, comentarios y notas. Michigan, EE.UU: Libros Desafío.
Kistemaker, S. J. (2007). Comentario al Nuevo Testamento: Hechos. Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
Metzger, B. (2006). Un comentario textual al Nuevo Testamento Griego. Sociedad Bíblica Americana.
Williamson G. (1993), en Carro, D., Poe, J. T., Zorzoli, R. O. (eds.) Comentario bı́blico mundo hispano. Hechos (1. ed.) El Paso, TX: Editorial Mundo Hispano.
Muy buena información mil gracias al Hno Gary Shogren.
angel
13/08/2021 at 2:23 pm